El Periódico de España ha decidido visibilizar las atrocidades cometidas en Annobón, la isla del Atlántico convertida en un infierno bajo el régimen de Teodoro Obiang Nguema Mbasogo. En un tono que expone sin tapujos las violaciones sistemáticas de derechos humanos, el artículo aborda la tortura, las desapariciones y la opresión que enfrenta el pueblo annobonés, mientras las autoridades ocultan la situación real de los secuestrados y detenidos arbitrariamente como arma de represión.
El testimonio de Orlando Cartagena Lagar, Primer Ministro de la República de Annobón, fue uno de los más crudos y desgarradores: “Los soldados violan a las mujeres en los campos. Secuestran niñas tan pequeñas como doce años y se las llevan a su campamento para abusar de ellas. Muchas vuelven embarazadas, destrozadas”, denunció. La represión en la isla no es un secreto, pero la indiferencia internacional ha permitido que continúe sin consecuencias.

El artículo del medio español revela también la reciente introducción de especies invasoras en la isla, incluyendo cocodrilos, como parte de una estrategia del régimen para amedrentar y controlar a los pobladores. Las autoridades guineoecuatorianas, como siempre, niegan cualquier responsabilidad, mientras los testimonios de los locales hablan de un ecosistema en colapso, con las detonaciones de la empresa constructora SOMAGEC destruyendo tierras de cultivo y viviendas. La empresa, fuertemente vinculada a la dictadura de Obiang, ha sido acusada de crear una “pesadilla ambiental” que, según los annoboneses, pone en peligro la vida de sus habitantes.
El Periódico de España también recoge el caso de las detenciones arbitrarias recientes. Annoboneses que, tras haber firmado una carta dirigida a Obiang pidiendo el fin de las explosiones, fueron secuestrados y trasladados por las fuerzas del régimen. «Nos llevan amordazados, como animales», declaró uno de los detenidos, quien logró ser liberado solo después de haber aparecido en televisión retractándose de sus palabras.
Sin embargo, la respuesta del gobierno de Obiang ha sido una vez más el silencio, acompañada de una cruel represalia que incluyó el corte total de las comunicaciones en la isla. A pesar de las protestas de la diáspora annobonesa en España, donde recientemente se han llevado a cabo manifestaciones frente al Ministerio de Exteriores, el régimen parece imperturbable.
Es irónico que mientras el gobierno de Guinea Ecuatorial intenta proyectar una imagen de modernidad y progreso en medios internacionales, la realidad en Annobón es una de miseria, miedo y represión. Como bien señala Cartagena: “Nos oprimen, nos matan de hambre y nos silencian. Annobón no es una isla olvidada por accidente; es olvidada a propósito para que Obiang y su familia puedan seguir controlándola con mano de hierro”.
La exposición de estas violaciones en un medio español representa un paso importante para romper el cerco informativo que el régimen de Obiang ha impuesto sobre Annobón. Sin dudas, este artículo es un recordatorio de que las voces de los annoboneses no pueden seguir siendo ignoradas. La comunidad internacional debe actuar con urgencia antes de que el régimen de Obiang termine con su plan de exterminio sobre la población originaria.