Tras el cambio de autoridades en el gobierno de Guinea Ecuatorial, el régimen de Teodoro Obiang Nguema Mbasogo enfrenta tensiones internas que revelan fisuras en su estructura de poder. Un reciente altercado entre el ministro de Deportes, Osa Osa Ecoro, y el vicepresidente, Teodoro Nguema Obiang Mangue, ha sacudido el entorno político, generando un ambiente de incertidumbre y descontento dentro de la dictadura.
Según informaron fuentes cercanas al régimen, el conflicto surgió cuando el vicepresidente cuestionó a Osa Osa Ecoro por su ausencia en la ceremonia de juramento del nuevo gobierno. La respuesta del ministro fue contundente: «Porque no me dio la real gana», lo que desató la furia del vicepresidente.
Teodorín, visiblemente enfadado, acusó al ministro de faltar el respeto a su padre, el presidente Obiang, a quien atribuyó todo el éxito y la posición del ministro. Ecoro, lejos de amedrentarse, respondió con palabras duras, subrayando que el vicepresidente no tenía la autoridad moral, profesional ni intelectual para reprenderlo. «Tú no estás a la altura para hablarme de esta forma. Eres un niñato. Sin tu padre, tú no estarías donde estás», replicó el ministro.
La tensión escaló cuando el vicepresidente, en un acto de violencia inusual, incluso para los estándares del régimen, abofeteó a Ecoro en ambas mejillas y procedió a golpearlo repetidamente. Según testigos, el ministro de Deportes salió del enfrentamiento «casi triturado», dejando en shock a los presentes.
El incidente no solo ha desatado rumores sobre posibles ceses dentro del gobierno, sino que también ha exacerbado el descontento generalizado entre los miembros del gabinete. La introducción de un decreto ley anti-nepotismo por parte del presidente ha generado críticas entre los ministros, quienes señalan la hipocresía de tal medida cuando el propio presidente y su círculo cercano son los mayores beneficiarios del nepotismo.
Varios ministros han expresado su frustración por las exigencias de esta ley, argumentando que debería aplicarse primero a la familia del presidente antes de ser impuesta a los demás miembros del gobierno. Esta situación ha creado un ambiente de tensión que podría derivar en cambios significativos dentro de la estructura de poder del régimen.
El altercado entre Osa Osa Ecoro y Teodoro Nguema Obiang Mangue pone de manifiesto las tensiones subyacentes en el gobierno de Guinea Ecuatorial, un régimen conocido por su autoritarismo y represión. La violencia física y verbal, junto con el creciente descontento dentro del gabinete, confirma que el régimen de Obiang podría estar enfrentando una crisis interna que, de no ser manejada con cuidado, podría tener repercusiones significativas en la estabilidad del país.