Durante las últimas horas, uno de los depredadores sexuales enviados por el régimen promotor del apartheid de Obiang fue filmado caminando desnudo por una de las playas de Annobón, que suele ser frecuentada por menores de edad, en una escena que no es casual sino parte de una estrategia sistemática del régimen ocupacional de Guinea Ecuatorial. Esta política de estado tiene como objetivo pervertir a la sociedad annobonesa, erosionando sus valores a través del nudismo, el alcohol y el sexo.
En el contexto de la reciente conmemoración del santo patrono de la isla, el vicepresidente del régimen, Teodorín Obiang Nguema, se autohomenajeó reconociéndose a sí mismo como “hijo predilecto de la ciudad de San Antonio de Palé”. Sin embargo, su ausencia en esta ceremonia de autoreconocimiento refleja la realidad de una isla militarmente ocupada y culturalmente diezmada.
En forma deliberada, el régimen introdujo en Annobón depredadores sexuales para corromper la mente de los menores y, en última instancia, pervertir a toda la sociedad. Su presencia no es casual, sino que busca justificar la dominación del régimen, atacando la base de la cultura Ambo, llevando adelante un apartheid con la supremacía de la etnia Fang, mediante la migración forzada de hombres y la violación de mujeres menores de edad, que darán a luz hijos de la etnia imperante.
Ver video: https://twitter.com/HablaKindjadja/status/1801731165017280532
Pero además, como indicamos en otra oportunidad, la masiva y reciente inmigración de ciudadanos Fang a la isla va en el mismo sentido y apunta a generar una segregación étnica en el territorio Ambo, apoyados por subsidios del régimen invasor para que estos se emplacen en esta tierra a la que consideran basura y por la que sienten profunda repulsión.
Este incidente no es un hecho aislado. En ese sentido, vale recordar el caso de una mujer que, frente a la sede del Vigil -un lugar sagrado para el pueblo annobonés- practicaba el nudismo con total impunidad, respaldada por el régimen ocupacional.

Situaciones similares todavía más cuestionables ocurren dentro del hermético campamento militar, donde los soldados Fang organizan fiestas sexuales con menores de edad, contribuyendo a la profanación y perversión de la sociedad annobonesa. Estas acciones forman parte de un plan sistemático e integral del régimen invasor, cuyo objetivo es atacar las bases de la sociedad nativa en medio de su lucha por la independencia de la República de Annobón.