Hace instantes falleció Anatolia Mum Majeda, una madre annobonesa cuya tragedia es un doloroso reflejo de la represión que azota a la República de Annobón bajo el régimen de Teodoro Obiang Nguema Mbasogo.
Anatolia, madre de dos hijos actualmente secuestrados por el régimen a raíz de los reclamos por el uso de dinamitas en la isla, se convierte en la primera víctima mortal relacionada con una protesta legítima que buscaba justicia y libertad para su pueblo.
Sus hijos, Diosdado y Bienvenido Ballovera Mum, de 45 y 50 años respectivamente, se encuentran privados de libertad y están siendo sometidos a todo tipo de vejaciones. La cruel realidad de su situación plantea preguntas desgarradoras: ¿Quién llorará por Anatolia? ¿Quién la enterrará? ¿Quién guardará sus restos mortales?
La muerte de Anatolia no solo representa una pérdida personal y familiar, sino también una tragedia comunitaria. Sus hijos, detenidos injustamente, no podrán darle el último adiós a su madre, ni rendirle los honores que merece. Este doloroso suceso subraya la brutalidad del régimen de Obiang y la urgencia de que se respeten los derechos humanos en Annobón.
Anatolia Mum Majeda es ahora un símbolo de la resistencia y el sufrimiento del pueblo annobonés. Su fallecimiento, sin el consuelo de tener a sus hijos a su lado, es una llamada de atención para la comunidad internacional y para todos aquellos que luchan por la justicia y la libertad en Guinea Ecuatorial. La historia de Anatolia y sus hijos es un recordatorio de que la lucha por los derechos humanos es una batalla constante y que cada víctima es una pérdida irreparable para la humanidad.
