La ola de secuestros nocturnos de ciudadanos annoboneses por parte del régimen de Guinea Ecuatorial continúa ocurriendo ante la impavidez de la comunidad internacional, violando todas las normas y garantías constitucionales.
La última víctima es Estrella Alfaro Aracil, de cincuenta años, quien fue secuestrada a las 4.00 de la madrugada de hoy en su casa por un grupo de civil. Este caso eleva el número de secuestrados a cerca de cuarenta personas, aumentando la tensión y el miedo entre la comunidad annobonesa.
En medio de esta situación, es importante recordar los numerosos casos de torturas y los largos interrogatorios a los que son sometidos los detenidos según trascendió durante las últimas jornadas. Organizaciones internacionales, como Human Rights Foundation, han denunciado estos abusos y han exigido la liberación inmediata de los secuestrados a pesar de la indiferencia del régimen de Teodoro Obiang Nguema Mbasogo.
En ese marco, debido a la falta de alimentos, familiares y amigos de los detenidos se ven obligados a acercar comida a los centros de detención, sin saber si estos suministros están llegando a destino e, incluso, si les permitirán salir del lugar o los mantendrán en cautiverio. La persecución contra el pueblo annobonés viene siendo denunciada en forma permanente por el Primer Ministro de la República de Annobón, Orlando Cartagena Lagar.
Mientras tanto, Annobón sigue incomunicada, sin acceso a teléfono ni internet. Hace semanas que nadie sabe qué está ocurriendo en la isla, mientras las autoridades del régimen realizan viajes constantes a esta tierra con motivos inciertos.
La situación es crítica y la comunidad internacional debe prestar atención a estas violaciones de derechos humanos que están dejando a un pueblo entero en la oscuridad y el desamparo.
